Una idea para la carta a los reyes

Uf...Prometí muchas cosas y al final, nada de nada...Pero es que en pocas semanas han habido muchos cambios y hemos tenido que hacer muchos ajustes de horarios y esas cosas.

Lo primero de todo, que me hace una ilusión tremenda, como no, es que he encontrado trabajo, en una cosa que me gusta. Yo soy administrativa, hace tiempo que estoy trabajando para el departament d'ensenyament (para educación, vamos) de la Generalitat haciendo substituciones de bajas por IT, maternidad, etc. Pero de unos 3 años para acá, casi ni he pisado ninguna escuela ni instituto, ya que, o no las cubrían o llamaban a interinos, porque echaron a muchos con los recortes. Pero hace cosa de 3 semanas me llamaron para ofrecerme ser interina a media jornada en un colegio de un municipio cercano. Oferta, como imagináis, que no rechacé.

Y en eso me hallo ahora, adaptándome a la vida laboral, adaptando horarios para el cole de los niños y no encontrando tanto tiempo para escribir como me gustaría...Pero muy feliz, por trabajar en algo que me gusta y salir un poco de la rutina de las 4 paredes de mi casa, que a mi, personalmente, me estaba matando...

Pero después de este rollo-happy que os he soltado, voy a lo que realmente quería contar, y es que a raíz del post de Srta. Ruthenmeyer sobre un juego que se llama Story Cubes, se me ha ocurrido que voy a hacer un pacto con los niños para los reyes. 

Más o menos, cada año, les dejamos elegir una lista de juguetes y sus Majestades, eligen uno para traérselo, suele ser el que más ilusión les hace, pero también suele ser el que les aburre antes, ya que de las expectativas (lo que ven en el anuncio de la tele) y la realidad, dista mucho.

Imagen de Pintando una mamá

Así que se me ha ocurrido que no hagan una carta a los reyes/papá noel al uso, sino que no pidan ningún juguete en concreto, que les cuenten cosas o que les hagan un dibujo de algo que les guste, como los corazones a Emma y el fútbol a Ivan y así se lleven una sorpresa con juguetes que nos parezcan que realmente les van a sacar el jugo. Como el juego de mesa que propone la Srta. Ruthenmeyer, un juego que mi hijo a priori no pediría, pero que tal y como es sé que le encantaría.

Espero que la idea les guste y funcione...