lunes, 20 de mayo de 2013

Una pequeña princesa guerrera




Si, en esta casa vive una niña preciosa, que merece ser tratada con título nobiliario incluido, toda una princesa. Pero a su vez es pizpireta, intrépida (pánico el que siente su madre al verla subida a la mesa), risueña y muy, pero que muy, tozuda. Y nosotros la queremos con cada una de sus virtudes, sí virtudes, porque tan pequeña no tiene defectos.

Esta señorita ya cuenta con casi 21 meses a sus espaldas y en el último mes se ha soltado a charlar que da gusto. Hace un mes decía pocas palabras: mama, papa, yaya tete, van (Ivan) y aba (agua)...¡Ah y teta! Por supuesto, como iba a faltar su teta...
Pero como decía de un mes para acá se ha soltado la lengua y habla con palabras que se le entienden, canta canciones y repite todo lo que dice su hermano, ¡es una delicia verlos juntos!

Y lo cariñosa que es, da besos y abrazos por doquier, dice hola cuando llega a un sitio y adiós cuando se va e irradia esa felicidad contagiosa que sólo poseen los niños...

Pero no todo va a ser bueno, que malo tampoco es, lo que pasa es que tiene un carácter que no veas y como no le dejes hacer algo, la lía parda. Se pone a llorar como si le fuera la vida en ello, se tira al suelo...vamos, una rabieta en toda regla (¿bienvenidos terribles dos?)...

La adoramos. ¿Nos queda otra opción?




3 comentarios:

  1. Sí, la otra opción es cométela a besos jajaja. Es que tenemos unas princesas muy guerreras!

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  2. Me lo ha quitado de la tecla Alejandra, la otra opción es comértela ajajajaj. Bueno con el tiempo si os sirve de consuelo las rabietas van a menos porque como son muy muy listas y todo lo entienden se van "apaciguando".

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